Una madre que por años fue víctima de violencia por parte de su esposo, hoy exesposo, soporta una nueva tragedia judicial y esta vez, desde el propio sistema de justicia utilizado por su expareja para castigarla por haberlo denunciarlo por violencia familiar.
La víctima soportó 15 largos años de violencia, fue alejada de su familia y sometida a tratos indignantes por todo ese periodo hasta que fue agredida en el estacionamiento de un Shopping, situación que fue viralizada.
La mujer está a días de afrontar juicio oral y público por supuesta apropiación de electrodomésticos que retiró con orden judicial de la casa familiar donde vivía con el agresor. El hombre reclamó lavarropas, horno, televisor, etc.
La inédita situación afecta gravemente no solo salud de la joven madre, también la de sus dos hijas ya que no logran cerrar un ciclo de violencia en la que están inmersas desde hace años, hoy, deben ver de vuelta a su madre perseguida por instituciones del Estado que en teoría deberían protegerla en su calidad de víctima, sin embargo, la revictimizan sin piedad alguna.
La procesada madre fue obligada a devolver todos electrodomésticos que retiró de la casa y de igual forma la fiscalía y el Poder Judicial impulsan una acusación hasta sentarla en el banquillo de acusados por haber denunciado a su expareja por violencia.
La mujer, lamenta estar pasando por este inentendible proceso penal donde se siente acosada por la propia justicia a través de sus operadores por haber denunciado al padre de sus dos hijas luego de haber sido agredida públicamente en un Shopping de Asunción en el 2020.
La víctima, no solo intenta superar su tortuoso matrimonio, también busca darles estabilidad emocional a sus hijas y ahora se encuentra con el temor de que reciba una condena por haber “robado” sus propias cosas que ya fueron devueltas.
El hombre soporta una condena firme de dos años con suspensión de la ejecución de la condena y pese a ello, denunció a exesposa por apropiación de electrodomésticos que había consentido se retire, para luego denunciarla por haberlas retirado.
La fiscal que imputó a la joven madre es Hermenegilda Cubilla y la jueza de garantías que llevó y elevó el caso a juicio oral es la jueza Ana Esquivel. Queda en manos del tribunal de sentencia juzgar la conducta de la mujer víctima y frenar o ratificar este proceso penal por el que se ha movido todo el aparato estatal a instancia de un condenado.