Se trata de la jueza de ejecución penal María Lidia Wyder Mendieta, según la denuncia la mora judicial de este juzgado es insostenible y que pagan con esa mora los justiciables que como su cliente que ya compurgó más de la mitad de la condena, pero, la jueza le niega el beneficio de la libertad transitoria.
Alfredo Delgado defensor de Ignacio María Denis condenado a diez años de cárcel por el operativo Austral, denunció que su cliente está privado de su libertad desde el día del operativo el 2 noviembre del 2018, a la fecha, ya ha cumplido con más de la mitad de su condena, y que se halla transitando satisfactoriamente por las etapas previstas en el Código Penal de Ejecución, actualmente se encuentra en el periodo de prueba en la penitenciaría industrial La Esperanza en el pabellón de semilibertad.
Agrega el abogado que, ante esta situación presentó un pedido de salidas transitorias a favor de su cliente, lo que llevó meses ser tramitada para luego ser rechazada por la magistrada que también fue recusada por el abogado por las irregularidades en la tramitación del expediente y por desconocimiento de la ley, según explicó.
“La jueza María Lidia Wyder Mendieta, siempre se ha caracterizado por una muy alta mora judicial, en tal contexto tanto las providencias, como los oficios ordenados tardan semanas, hasta meses en expedirse, por tal motivo recién se fijó audiencia de sustanciación para el día 14 de octubre de 2024. En dicha fecha culminó la audiencia y el juzgado al finalizar en el acta manifestó que resolvería en el plazo de ley (3 días), pero, resolvió en 10 días no respetando el plazo de ley”, refiere el abogado Alfredo Delgado.
Agrega que la magistrada hoy recusada, casi no asiste a su sitio de trabajo en la ciudad de Fernando de la Mora, con suerte va a su juzgado los lunes y los jueves, todo so pretexto de que es interina y que tiene a su cargo otro juzgado en Asunción, de esta situación son testigos todos los jueces, actuarios y funcionarios de los juzgado de Fernando de la Mora, ante dicha situación no sería lo más lógico, que la hoy recusada comunique la Corte Suprema de Justicia, que no tiene la capacidad para tener su juzgado al día y pedir que cese el interinazgo, a efectos de que venga otro juez que si tenga ganas de trabajar.
La denuncia se realiza ante la cámara de apelaciones a la que se detalla las irregularidades en la que incurre la magistrada que fue recusada por el abogado con expresión de causa.